En son de agradecimientos me olvidé,nunca es tarde el agradecimiento a Brenda Dagnino
por la fotito(volaba su vestido de tull blanco,mientras el click del disparo hería nuestro corazón,con la imágen del gol de Noriega).Y a todos(a Diego Sánchez Otero,a Carlitos Scuarchi,a Pablito a Joa...).Sabe a quien no puedo agradecerles a estos jugadores del "gallo",porque tal vez por viejo(tendría que poner una frase serena y "light"),pero uno no puede sentir hipocritamente y endulzar a estos muchachos que vienen en una sola misión atractiva el "vil metal" ;no tienen como adicción el amor x el Club,la pasión por la camiseta,el hambre de gloria.Les aseguro no quiero salivar para arriba,porque ese escupitajo haría recordar por ejemplo al Iñíguez conductor del "funebrero" y no este retazo glorificado por nuestros pares através de las pequeñas sutilezas del medio campista y eso que el nombrado es uno de los menos reprochable.En el primer tiempo se vislumbrava todo lo que se iba a sufrir,que libres se veían los equinos retozando allá en el campo aledaño.Es que Morón estaba desde el inicio tan maniatado a los horrores defensivos-la zaga parecía armada por Boris Karloff,aquél creativo de las obras maestras del terror- a Reano le hacía uno y otro nudo el "pibito" Sandoval,ese mismo que quería ir a Morón y ni bola...(lo quiere Caruso),junto al otro iniciado en Boca(Báez) no paraban ni a la Lujanera(que hace años quebró).Para colmo Gonzalito se ponía ultra histérico tratando de ir al cruce de apuro y allí el limitado Nigeriano Akuchie le movía la estantería a Morón.
El medio también era "zona liberada" para Flandria,donde Alejandro González entraba por derecha y los centros llovían para que alguien que siempre ganaba la posesión del balón fusilara a un Migliardi que salvó seis veces la caída de su valla,en un primer tiempo donde solo un remate rasante de Iñiguez, se fue a varios metros del palo derecho de "manguera" Gagliardo,y otra donde la única bocha clara que metió la "peponita" Ponce -de derecha a izquierda- para un Damián que fue el único de los presentes que no se avivó que la bola era para él.Creíamos,ilusos nosotros que en el complemento la actitud de la visita sería otra. No,lo siguió atosigando el "amarillo"
amarillo=huevo:sí me conformaría con el blanco de la clara para poner un poquito...
Y llegó el picotazo otro de los centros de Alejandro González desde la derecha y un Noriega que no dudó en batir a un enorme Migliardi;de no ser por "chiche" y los palos
nos llenaban la canasta,igual nos comieron los tres porotos.Después del gol Blanco apeló a los cambios que en un juego de colores nunca le pudo dar ese tono de rojo sangre pasión.Cuantas veces llegó el "gallo" en el ST ninguna,error UNA fue en la última jugada del partido donde el "paraguagol" sacó un remate que se colaba y Gagliardo la desvió para irse en andas.
Nada de na.. un sabor amargo repetitivo y doloroso.
por Raúl Lucero.
lunes, 29 de noviembre de 2010
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