sábado, 20 de noviembre de 2010

El romanticismo de la derrota.

Que sensación extraña,sobre el final de Español 2 vs. Morón 1,vinieron mis amigos a visitarme(Jorge y Gonzalo) en mi reposo y me sentenciaron no te amargués-al ver mi rostro-.Muchas veces el equipo que uno adora,te da más penas que alegrías.Y me sentí adentro de ese cuento "defensa de la derrota",publicado en el libro "los trenes matan a los autos" se lee:"le punzarán algunas miradas furtivas.De reojo.No deberá hablar casi.Ni insultar.(..)Deberá callar largamente.Sentirá entonces,creciéndole un orgullo callado,quieto.Será la dignidad.(...)Sentirá entonces,en el pecho,detrás de los labios,un escozor denso y aguachento.Será el romanticismo,que envuelve en una gasa tenue todas las derrotas".¿de qué otras derrotas hablaría Fontanarrosa en ese párrafo?¿De qué otros dolores?.Y por los jugadores qué pasa señores.¿qué interpreta cuando dicen que no entienden las consignas?.Decía ese gran olvidado por el ambiente del fútbol argentino que es José "Piojo" Yudica:"Cuando los jugadores no quieren algo...".Y reflexionemos:sobre estos fantasmas que instalan el miedo y vienen desde hace tiempo,este plantel parece condicionado al miedo futbolero.En ese laberinto de dudas,inseguridades y flaquezas que provocan los malos resultados,la palabra que agrupa esa marea de sensaciones negativas no es otra que el temor,ya perfilado como un fantasma que pulveriza la iniciativa y somete las jerarquías y capacidades.No desconocía este hecho Méndez,ni lo desconocerá el actual técnico Blanco,este escenario en el que los factores anímicos determinan conductas deportivas.Hace unas semanas en un coqueto bar de Castelar,Borghi habría expresado:"cuando aparecen las dudas y los miedos se termina todo muy rápido.Miedos que se arrastran de antes.Y que permanecieron porque los resultados no fueron los esperados.El jugador en esas circunstancias retrocede,pierde seguridad,se atreve a hacer menos cosas en relación a sus condiciones.Algo de todo eso pasa en en nuestro querido equipo de fútbol."el cagazo"!!lo llamaría el "Loco" Gatti.¿Como despojarse de esos miedos? Depende de la personalidad de los jugadores.La apatía que viene denunciando el equipo,como puede resolverse?Este un valor intransferible de cada uno.Los daños colaterales producen un fútbol saturado de tibiezas,de errores groseros.De pobreza conceptual.Para salir del pozo se precisa cierta épica.Crear más que nunca en el equipo.De lo contrario,al entrenador(por más pergaminos que tenga)se lo van a comer los leones.
El DT(canillita y experimentado como Bianchi)tendrá al menos que inculcar cuatro conceptos:1)Concentración(para retroceder en bloque cuando se pierde la pelota).2)Presión arriba(todos contra la salida rival,como los elencos con pretenciones).3)Movilidad(nadie mirando el partido como un espectador,ni siquiera el más cotizado).4)Definición(que le peguen al arco rápido y con asiduidad,porque en esta categoría falta espacio).Tal vez algo de esto pasó en el Bajo Flores hoy,cuando en un aburrido cotejo al menos los nuestros se habían puesto en ventaja con un paladín de ir a todas
(Barrios Suárez),será por eso que el puñado de allegados al Dep.Morón(el hincha es muy leal):se dió cuenta que Morón no jugó a nada y el único que sobresalió (fue sustituído);será que alguien le esbozó su disconformismo al plantel-alambrado mediante- y por ello Akerman habría reaccionado intespectivamente.
Con sentimiento Raúl Lucero.

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