Si bien es verdad qe el día del Padre, como otras tantas fechas similares, tiene un costado letamente comercial, también es cierto que sirve para pensar, reflexionar y acercarse con un beso o un abrazo al ser querido. Por eso para aquellos que tienen la dicha de tenerlo, qué mejor oportunidad que dedicarle el día entero, aprovechar para decirle cuánto se lo quiere y por qué no, limar alguna aspereza si es que las hay. Si el viejo ya no está entre nosotros seguramente su ausencia avivará el fuego de la nostalgia. Será cuestión de mirar al cielo, buscarlo por algún lado y decirle que además de extrañarlo lo necesitamos.
En un caso o en el otro, el día del Padre sirve para agasajar y fundamentalmente recordar al ser que nos dió y nos aconsejo para transitar los caminos de la vida.
Y entrando en tema estrictamente histórico, vale decir que se celebra el tercer domingo de Junio pués en el año 1966 el presidente de los EEUU Lyndon Johnson firmó un decreto convalidando ese día en homenaje a John Bruse Dodd, considerado padre ejemplar, por haber cuidado a sus nueve hijos. Si esto le parece inadmisible, mucho peor le caerá saber que el día del Padre se festeja en nuestro país desde 1958. Por ese entonces, se celebraba en Agosto, en conmemoración con la fecha en que falleció el General Don José de San Martín, Padre de la Patria. Ocho años después, y por una decisión llegada de afuera la fecha paso al mes de Junio.
Es de imaginar que las autoridades fijaron definitivamente ese día, pués una gran mayoria de paises tomó el tercer Domingo de Junio como Día del Padre. Sin embargo, en Italia, España, Andorra, Bolivia y Honduras, la fecha es el 19 de Marzo en cohincidencia con la festividad de San José.
De todas maneras, fecha y origenes tienen que ver poco con los afectos. Hoy, como siempre habrá que estar cerca del ser querido para brindarle todo el afecto del mundo. Con obsequio o sin él. Todo papá sabe que el mejor regalo que puede recibir es la presencia de su hijo. Y mucho más cuando se festeja su día.
Los hijos .
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