jueves, 21 de abril de 2011

UN "CABAEZÓN" DE VISITA



Alejandro Julián Méndez, un tipo claro, sencillo, humilde, un ídolo del “gallo” que entre sus galardones cuenta con haber sido nada menos que el centrodelantero del último campeonato que consiguió el Deportivo Morón, allá lejos y hace tiempo, en abril de 1990. La noche del domingo estuvo de visita en el Urbano como D.T. de Almagro, y a la salida del vestuario visitante, no paró de recibir muestras de cariño, mientras hacíamos la nota. Primero, se refirió al cotejo disputado entre ambos equipos de esta forma: “Fue un partido intenso, la cancha estaba rápida, un poco complicada para conservar la pelota y tocar, tener la posesión del balón. No tuvimos zozobras en casi todo el partido, y tuvimos también buenas opciones aunque a esa posesión no la pudimos traducir en tantas situaciones de gol, pero la intención fue siempre de atacar y poner gente en ofensiva”, y luego habló con algo de dolor de su último paso por el club, de los inconvenientes que tuvo esta vez como D.T. del “gallo”, puesto que ocupó hasta la 16ª del actual torneo, en la que fue despedido cuando el su equipo se encontraba en al cuarta ubicación en la tabla de posiciones: “La sensación que me deja esta noche es que algo hemos hecho, algo que tiene una marca distinta quizás a lo que se acostumbra. Es gratificante, es algo que tal vez no es normal, como un reconocimiento que me hace bien y también al cuerpo técnico lo pone muy contento porque es conocida la posición del cuerpo técnico con respecto al club. Morón tiene que apostar a gente que quiera trabajar por el club, apostar por el club, ya sea dirigentes, cuerpo técnico, la gente, que tiene que tener ciertas características personales, querer al club, tener una ética, armar relaciones fuertes a partir de vínculos reales que te permitan salir adelante cuando las situaciones son adversas. Mientras eso no ocurra, es difícil que las cosas salgan bien. Mientras haya divisiones, mientras sea complicado lograr consensos, porque muchísima gente tira para atrás en un montón de cosas, pareciera que están esperando todo lo malo, así las cosas van a costar mucho.” Finalmente, hizo alusión a un caso, el del actual enganche del equipo, de la evolución que tuvo y el trabajo que realizaron con él especialmente: “Nosotros tuvimos un mensaje, siempre el mismo, y tratamos de llevarlo a cabo. Por ejemplo, el caso de Nahuel Chacón que ahora está jugando y él internamente sabe porqué ahora cuando entra está 10 veces mejor que antes, con las dificultades que tenía antes y veo que ya no las tiene o que las está superando. Eso tiene que ver con un trabajo que hicimos con él y que no fue fácil, porque cuando yo estaba había muchos que lo querían dejar libre, escuché a muchos que dijeron eso. A mi no me corresponde decir en qué se basó ese trabajo pero sabíamos de la capacidad que tiene Nahuel y por eso apostamos a que se quedara en Morón, y había cosas que tenía que mejorar y las mejoró y el mérito es de él. Como esas, hubo un montón de cuestiones, pero hay mucha gente que no reconoce nada. Y muchos de los que decían que tenía que quedar libre, ahora dicen: “no, ahora tiene que quedarse”, y así escucho todavía muchas cosas en las que se falta a la verdad o cuestiones que las tergiversan. Para que Morón ande bien, todos tienen que sumar, y eso lamentablemente no sucede en este club”. Tal vez polémico, pero quién puede tan siquiera animarse a dudar de la buena fe del “cabezón”.

Martin Capaccio.

No hay comentarios: