JUGADOR X JUGADOR 41ª FECHA

Aquí están, uno por uno, los que ayer consiguieron la igualdad ante Flandria. La sensación es que tendrán que mejorar mucho, colectiva e individualmente, para poder tener buenas chances en caso de clasificar al reducido que otorga una plaza para la promoción frente a un equipo del Nacional "B". Migliardi, Pinto y Akerman, deberán aportar su experiencia, Acosta, González y Lillo, la entrega de cada partido, Iñiguez, Ponce y Barrios Suárez, la armonía y el gol. En ellos confiamos, porque son los que nos representan, si se quiere, un pedazo de cada hincha también, porque en este momento hay que apoyarlos. Es cierto que por mínimo que sea el análisis, no se puede dejar de reconocer que el equipo no tiene una identidad, que carece de volumen de juego, de un funcionamiento coordinado, que no es vertical y por lo tanto, no es contundente. Morón juega a lo que sale, como si no tuviera una partitura que ejecutar, va improvisando la melodía del partido pero con escasos instrumentos, entonces la performance es monótona, reiterativa, y así es muy difícil no ya merecer un triunfo, sino conseguir resultados, aunque más no sea. Pero la ilusión está, siempre; y quien es capaz de no permitírsela?


A. MIGLIARDI: Sobrio, hasta los últimos 5’ del partido, esencial, para que Morón se haya quedado al menos con un punto, en las dos últimas intervenciones decisivas del partido.
R. ACOSTA: Aeróbico, tiene dinámica y actitud. Es el único jugador de Morón que usa el callejón para intentar llevar peligro al arco rival.
C. GONZÁLEZ: Expeditivo a la hora de despejar balones que pueden complicar a su equipo. Participó en la cancha de arriba en el área contraria. Tiene que ordenarse para ser un gran jugador.
J. BOGAO: Raspó como siempre, y también así obtuvo su 10ª amarilla. Está afirmado.
J. P. ROCCHI: Un batallador. En el debe, se le escaparon un par de veces por su lateral.
F. IÑIGUEZ: No se impuso en su costado, ni sumándose en ataque, ni retrocediendo coordinadamente cuando su equipo no tiene la posesión del balón. Intrascendente, una sombra del buen jugador que es.
G. PINTO: Más posicional que ubicuo, más horizontal que vertical, casi una fotografía de lo que es el equipo, que no logra convencer.
H. LILLO: Lo suyo es generoso, disputa más de lo que juega, pero para eso está. Nunca da un balón por perdido, tiene coraje.
S. D. PONCE: Arranca bien, la pide, intenta, pero de a poco se va diluyendo lánguidamente, se va divorciando de las buenas ideas y el devenir es impreciso, improductivo. Empieza con las luces encendidas, pero termina buscando a sus compañeros con una linterna.
D. B. SUÁREZ: Participativo, activo, se faja contra todos los defensores, pero muy lejos de su producción antes de la lesión que lo marginó por varios partidos, cuando era uno de los mejores, sino el mejor.
D. AKERMAN: Se siente tan sólo que se lo termina creyendo entonces baja los brazos antes de tiempo. Vamos superhéroe, no afloje justo ahora!
G. ADA: Ingresó con la misma actitud, ganas y empuje de siempre, pero no le alcanza para cambiar un resultado.
C. ESCUDERO: Reemplazó a un inexpresivo Iñiguez y tardó un rato en acomodarse. Tiene recorrido por su andarivel, pero se le hace muy difícil desequilibrar en un equipo que anda con las barajas gastadas.

Martin Capaccio.