Morón se quedó con el clásico frente a Chicago en un partido lleno de emociones y nerviosismo. Si bien no fue merecido, se quedó con los tres puntos por efectividad.
Achaval, en su debut, decidió poner las cosas en su lugar. Estas modificaciones no surgieron efecto, por lo menos desde la faceta ofensiva, ya que Chicago fue quien tomó las riendas del partido. Si Morón no se fue al entretiempo en desventaja fue gracias a Rojas, que logró achicar a tiempo y atajar un mano a mano frente a Maggi con su brazo derecho bien estirado, y gracias a un casual offside de un jugador de Chicago que no permitió la visión del arquero, quien no había logrado evitar un buen remate fuera del área tras un centro despejado a medias.
El complemento fue mucho más acorde a lo que se espera en un partido de este calibre, con una temperatura dentro de la cancha que comenzó a aumentar entre tantas infracciones y ciertas equivocaciones por parte del árbitro. En cuanto a lo futbolístico, "el torito" mantuvo su rol de protagonista y de mandatario en el partido. Cuando más se notaba que Morón necesitaba otro aire, Sergio decidió sustituir la dupla de delanteros y con el ingreso de Romero y Sala cambió la cara del partido. Poco tardó en hacer efecto esta modificación porque a los 78´, tras un centro de Chicago y un despeje de Romero, una perfecta combinación entre Berterame, Sala, el mismo delantero Chaqueño y González pusieron la ventaja para el local que explotó en un grito de desahogo y felicidad por cómo venía siendo el desenlace del partido. A partir de allí, Morón supo no sufrir y mantener ese gol de diferencia hasta el final del partido.
Con este envión, Morón se encontrará nuevamente con un rival sólido el próximo domingo cuando se vea las caras frente a San Miguel.
Dale Gallo!!⚪🔴⚪
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