Partido visagra? La verdad es que no se si Morón tocó el fondo con la derrota con Comunicaciones y ahora comienza la remontada o bien tuvo un buen segundo tiempo y punto. Lo que si estoy seguro es que era un partido atípico para mí.
Lo que marcaba una noche rara, era la soledad con la que me sentía cuando me dirigía a la cancha, mis compañeros del programa estaban con complicaciones personales y vieron mejor opción mirarlo por TV. Además, hay que sumarle que a ninguno de los colaboradores del programa les motivaba ir a hacerse mala sangre con el presente futbolístico de Morón, salvo a Joaquín. Pero Joaco es una persona particular,
partiendo de la base que es hincha de Morón y vivió toda su vida en Mercedes, que está siempre al pie del cañón y no se pierde ningún partido del Gallo. No obstante, me reconoció que no estaba muy motivado porque también se sentía en soledad, pero el mensaje que le mandé pisando las 19.30hs le dio el empujón necesario para acomodar todo y arrancar.
Nos encontramos en la puerta de la cancha y a medida que íbamos entrando, nos poníamos al día y hacíamos una reflexión del presente futbolístico del Club.
Mientras subía los escalones, saludaba a los conocidos y miraba la formación de Morón desde lejos. Estaba lleno de dudas. No hay nada peor como periodista partidario, para mi, que tener el equipo rival completo y no tener los once del Gallo. En el blog había puesto una tentativa, debido a que el DT no había querido confirmarla la noche anterior en el programa. Algunos aciertos veía y las dudas estaban consumadas. La sorpresa estaba en el doble cinco, donde ingresó La Cobra Araúz, un pibe de la cantera de Morón con muchas condiciones, pero que falta foguearlo un poco más.
Me doy vuelta y llegaba el profe. Termino de copiar la formación y ya empezaba el partido. Saludé a uno, saludé a otro y me senté como un plateísta más junto al profe y a Joaco. Comenzó el partido y hacíamos un análisis línea por línea. Con el correr de los minutos, hablaba a dos puntas para encontrar explicación a lo que veía, por un lado tenía a un DT de juveniles y por el otro a los Profes y a Joa. Por ambos lados encontraba que bajábamos los brazos y nos resignábamos a otro cero a cero. Porque Atlanta probaba desde afuera sin éxito, porque el Mágico González era lo único que tenía y Morón, con muchas inseguridades, llegaba sin fuerzas al área del Bohemio y no llegaba a incomodar a Llinas. Llegó el pitazo de Prietto y a descansar la vista. Me olvidaba que, un minuto antes de finalizar el primer tiempo, el DT había sacado a La Cobra y había puesto a Lovera, cambio que no compartía porque me parecía sacarle la confianza a un chico, pero que en realidad no estaba viendo que era por una lesión.
Apenas sonó el silbato, sonó mi celular, estuve hablando durante todo el entretiempo y comencé la reflexión del primer tiempo cuando salieron los jugadores a la cancha.
Largó el segundo tiempo, mientras charlaba de los cambios con una colega, ví la corrida de Nico Falczuc desde la mitad de cancha y el gol que hizo para delirio y esperanza de todos los testigos presentes. Una actitud totalmente distinta del delantero y del equipo. Se cortaba la racha de casi 400 minutos sin convertir goles y Nico era aplaudido después de tanto tiempo por todo el estadio. Gol y aplausos, 100% necesario, porque motivó a todo el equipo y empezó un aluvión de llegadas, que no eran tan peligrosas pero parecían serlo. Atlanta hizo más de lo mismo del primer tiempo y Morón había cambiado un poquito la actitud, cambio necesario para soñar con algún gol más. Muchas jugadas combinadas entre Reano y Chacón, Nahuel tirando algunos tacos que levantaban el ánimo del público, se sumaba Bilbao de a ratos por la punta izquierda, también los hacía Falczuc y por la derecha, cuando entró, aportaba centros Velazquez. Morón dominó el segundo tiempo y el único de Atlanta que estaba movedizo aún era el Mágico, pero como no hacía magia, solo no podía hacer nada. Las más claras que quedan en mi retina sobre el final del partido son, un mano a mano de Bilbao que no pudo picar sobre los 40 minutos, una jugada combinada que termina con un disparo cruzado de Chacón que se va cerca del palo izquierdo de Llinas cerca de los 43 y la engolosinada jugada que termina Ceresetto en los pies de un defensor en el último minuto de juego, teniendo a Bilbao libre por la izquierda.
Es de destacar la seguridad de Chiche en la valla del Gallo, la firmeza de González en el fondo, la garra de Bruno en la mitad de cancha, los lujos de Chacón de mitad de cancha para arriba y el cambio de actitud de Falczuc en la delantera. Lo que preocupa un poco es que los tres jugadores reemplazados en el Gallo (Araúz, Vega, Falczuc) fueron por molestias musculares. Además le sumamos un golpe que recibió Bilbao.
Deportivo Morón 1 vs Atlanta 0 (Falczuc)
DEPORTIVO MORÓN: 1 Alejandro Migliardi; 4 Daniel Cerruti, 2 Cristian González, 6 Guillermo Baez-A, 3 David Reano; 8 Marcelo Vega (15 Gustavo Velazquez), 5 Hernán Bruno-A, 11 Maximiliano Araúz Lazaga (16 Carlos Alberto Lovera ), 10 Nahuel Chacón; 7 Nicolás Falcsuk (18 Lucio Cereseto), 9 Ignacio Bilbao. DT Alejandro Méndez
12 Diego Ezquerra, 13 Sebastián Lamacchia, 14 Luis Ferreyra, 17 Bruno Benvenuto.
ATLANTA: 1 Rodrigo Llinas; 4 Gastón Lolli, 2 Carlos Arancibia, 6 Carlos Izquierdoz, 3 Juan Segovia-A (13 Nicolás Cherro); 8 Juan Galeano-A (18 Emanuel Tirantino), 5 Guido Rutili, 11 Raúl Quiroga; 10 Miguel González; 9 Andrés Soriano, 7 Leandro Guzmán (17 Juan Acosta Cabrera). DT Javier Alonso
12 Fabián Moyano, 14 Martín Parisi, 15 Federico Mociulsky, 16 Acuña.
Arbitro: Mario Prieto.
Asistentes: Mariano Rúas y Gabriel Villarreal
Recaudación: $5.615
Alejo Lucero Santojanni
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